Cuatro en una.
Ella, a la que la memoria tilda como
"la soñadora" dibuja anhelos de libertad en la celda
de lo estrepitoso... (Vainilla)
Siente burbujas en su flujo sanguíneo y le cuesta
palpitar, fabricar dimensiones, y envolver el cerebro.
Vainilla era aquella que me hacía desempolvar por dentro, cuando
una imagen inundaba la hostilidad de mi iris desabrido.
Lo volvía acuático. Tienes ojos de agua dulce?
Era ella la que me negaba trazar un paralelo entre los pellizcos,
los "es un sueño?"
y mis 60 parpadeos por minuto, convirtiéndome
en una desarticuladora de realidades y en una estupida
ilusa que urga hasta lo más hondo de su existencia con
las animidades que programa su temporal.
Maldita Vainilla, sólo impregnaba de magia su caminar, y la
teletransportaba a un planeta sin reloj.
Sólo...
Llenaba la vida de Violeta de amores incompletos, sólo
mitades fabricadas con los retazos de sus esperas.
De sus "Nada aún."
Un agujero negro se adueño de su estómago,
esa incertidumbre que calcina las entrañas.
Vainilla dejó de visitarla por un tiempo...
"la soñadora" dibuja anhelos de libertad en la celda
de lo estrepitoso... (Vainilla)
Siente burbujas en su flujo sanguíneo y le cuesta
palpitar, fabricar dimensiones, y envolver el cerebro.
Vainilla era aquella que me hacía desempolvar por dentro, cuando
una imagen inundaba la hostilidad de mi iris desabrido.
Lo volvía acuático. Tienes ojos de agua dulce?
Era ella la que me negaba trazar un paralelo entre los pellizcos,
los "es un sueño?"
y mis 60 parpadeos por minuto, convirtiéndome
en una desarticuladora de realidades y en una estupida
ilusa que urga hasta lo más hondo de su existencia con
las animidades que programa su temporal.
Maldita Vainilla, sólo impregnaba de magia su caminar, y la
teletransportaba a un planeta sin reloj.
Sólo...
Llenaba la vida de Violeta de amores incompletos, sólo
mitades fabricadas con los retazos de sus esperas.
De sus "Nada aún."
Un agujero negro se adueño de su estómago,
esa incertidumbre que calcina las entrañas.
Vainilla dejó de visitarla por un tiempo...
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